Como ya he comentado en alguna otra entrada en el enfoque cooperativo la tarea de la evaluación tiene mucha relevancia. Es muy importante que el profesor tenga claros los objetivos del aprendizaje y que el alumno los conozca. Pero no solo que conozca el punto final de su aprendizaje, también debe saber cómo va a llegar y cuál va a ser la forma de evaluarle. La evaluación debe ser formativa y debe contener:
Existe una herramienta que ayuda a facilitar que la evaluación en el aula sea realmente formativa: la RÚBRICA DE EVALUACIÓN. Esta herramienta consiste en una matriz de doble entrada en la que describimos (en la columna de la izquierda) el lista de CRITERIOS DE EVALUACIÓN, y en la fila superior los diferentes NIVELES DE CONSECUCIÓN de dichos criterios. Una aclaración:
Cuando se empieza a trabajar con rúbricas te puedes enfrentar con varios problemas:
Para tener una orientación de como hacer la rúbrica se puede consultar la página de Eduteka o la propuesta de CORUBRICS que es una ayuda para evaluar con rúbricas.
Lógicamente no podemos confeccionar rúbricas para cada actividad del aula. Supone una inversión de energía importante. Yo las recomiendo para evaluar actividades más complejas, como trabajos, PBL, Webquest... Por otro lado hay que indicar que existen criterios de evaluación que pueden ser comunes en diferentes rúbricas, como por ejemplo aquellos que afecten a cuestiones actitudinales, organizativas o de competencias básicas. Lo que si que se diferenciará de una rúbrica a otra son los criterios relativos a los contenidos propios de cada trabajo.
INFORMACIÓN + METAS + PROGRESO
Existe una herramienta que ayuda a facilitar que la evaluación en el aula sea realmente formativa: la RÚBRICA DE EVALUACIÓN. Esta herramienta consiste en una matriz de doble entrada en la que describimos (en la columna de la izquierda) el lista de CRITERIOS DE EVALUACIÓN, y en la fila superior los diferentes NIVELES DE CONSECUCIÓN de dichos criterios. Una aclaración:
- CRITERIOS DE EVALUACIÓN: son los aspectos que vamos a evaluar y que todos en su conjunto ayudarán a lograr los objetivos finales del tema o trabajo. Estos criterios deben ser RELEVANTES, RESUMIDOS en su redacción, CLAROS y CONCRETOS.
- NIVELES DE CONSECUCIÓN: son los diferentes niveles de calidad en que el alumno puede alcanzar esos diferentes criterios. Para cada nivel se debe indicar el detalle de calidad que se exige.
Cuando se empieza a trabajar con rúbricas te puedes enfrentar con varios problemas:
- definición de los criterios: ¿tenemos claro a priori lo que vamos a evaluar cuando pedimos un trabajo?
- concreción de los diferentes niveles de calidad, ya que tenemos que retratarnos a priori e indicar exactamente la puntuación que daremos a cada rango de consecución del trabajo. Y no es fácil, os lo aseguro!!!!
- claridad, divino tesoro. Importantísimo para que los alumnos comprendan la tabla, por que si no lo hacen... no nos ha servido de nada.
- todos los criterios valen lo mismo: yo empecé dando el mismo valor a todo, pero luego observé que no consideraba igual de importante algún criterio. Lo que hago ahora es ponderar y dar diferentes pesos, eso sí, la suma de todos debe dar el 100% o el máximo de la nota final prevista.
Para tener una orientación de como hacer la rúbrica se puede consultar la página de Eduteka o la propuesta de CORUBRICS que es una ayuda para evaluar con rúbricas.
Lógicamente no podemos confeccionar rúbricas para cada actividad del aula. Supone una inversión de energía importante. Yo las recomiendo para evaluar actividades más complejas, como trabajos, PBL, Webquest... Por otro lado hay que indicar que existen criterios de evaluación que pueden ser comunes en diferentes rúbricas, como por ejemplo aquellos que afecten a cuestiones actitudinales, organizativas o de competencias básicas. Lo que si que se diferenciará de una rúbrica a otra son los criterios relativos a los contenidos propios de cada trabajo.
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